Este año salimos a la calle tomando todas las medidas, para jugar a la guerra más bonita del mundo: la que sustituye las pistolas por polvos de colores y globos.
Los hindúes festejan esta fiesta porque con la llegada de la primavera el tiempo es inestable y por esto causa fiebre y malestares: los polvos de colores tienen un significado terapéutico… cada color se hace con una combinación de hierbas medicinales diferente, como si fuesen un talismán para no enfermar!.
Nosotros hemos querido poner color a nuestras vidas y como no tener nuestro propio talismán.
Hemos disfrutado también con la fiesta de coctel donde no se acaba el color y la diversión.
Hemos bailado, reído y soñado por un momento, olvidando el tiempo tan complicado que estamos viviendo todos.
Gracias a Toñi (Concejala de Festejos) que nos ha ayudado a que pasemos este día tan bonito para que sigamos soñando.